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¿Alguna vez has soñado con escribir correos electrónicos desde la playa en Bali, trabajar desde una cafetería acogedora en París o atender llamadas desde una cabaña en las montañas de Suiza? Gracias a los avances tecnológicos, la mayor flexibilidad por parte de los empleadores y la creciente prevalencia de visas para nómadas digitales, este estilo de vida ahora es más accesible que nunca.
Pero, aunque este modo de vida puede ofrecer beneficios considerables en términos de libertad y flexibilidad, también existen factores legales y de cumplimiento que debes considerar. En este artículo, abordaremos todo lo que necesitas saber para explorar el mundo sin tomarte un año sabático ni agotar tus vacaciones pagadas.
¿Qué es un nómada digital?
Un nómada digital es una persona que trabaja de manera remota mientras viaja por el mundo, combinando trabajo, vida y viajes en una experiencia continua. Generalmente, se enmarcan en una de tres categorías:
- Empleados remotos con empleadores flexibles
- Freelancers que ofrecen servicios a clientes
- Emprendedores y propietarios de negocios
Algunos nómadas digitales se establecen en un país durante meses o incluso años, mientras que otros van saltando entre destinos, trabajando desde cualquier lugar con conexión WiFi. Muchos eligen destinos con un costo de vida más bajo, lo que les permite estirar más sus ingresos y construir un mejor equilibrio entre trabajo y vida personal.
El papel de la visa de nómada digital en 2025
Para satisfacer la demanda de los nómadas digitales, muchos países han introducido visas especiales diseñadas para trabajadores remotos. Estas generalmente permiten que te quedes por un período limitado sin estar sujeto a los requisitos usuales de inmigración o impuestos.
A partir de 2025, los países que ofrecen visas para nómadas digitales incluyen España, Italia, Croacia, Estonia, Tailandia, Japón, Panamá y Turquía —y la lista sigue creciendo. Cada visa tiene sus propios requisitos, que van desde ingresos mínimos hasta seguro médico y estatus de empleo— hablaremos de ello en más detalle a continuación.
Cómo convertirse en un nómada digital: 6 consideraciones importantes
las maletas, hay algunos factores legales, financieros y prácticos importantes que debes considerar. Sigue leyendo para saber todo lo que necesitas.
1. Elegir la visa adecuada para tu situación
Las visas para nómadas digitales varían significativamente de un país a otro, y los requisitos específicos pueden influir en dónde comenzarás tu aventura de trabajo remoto. Aquí tienes algunos factores a considerar al comparar visas:
- Ingresos mínimos requeridos: Por ejemplo, Portugal exige ingresos de €3.480 al mes, mientras que Croacia pide €2.870 más €287 por cada dependiente. Algunos países no tienen requisitos de ingresos.
- Ahorros mínimos requeridos: Algunos países también exigen demostrar una cantidad ahorrada antes de conceder la visa para nómada digital. En Italia, necesitarás demostrar un saldo total de €30.000 o más; en Georgia, €22.000.
- Costos de la visa: Algunas son gratuitas o tienen una tarifa nominal de €10-20, mientras que otras cuestan varios cientos de euros. También puede haber tasas de aplicación.
- Requisitos de empleo: Ciertas visas están disponibles solo para empleados remotos, otras también para freelancers y emprendedores. Normalmente, no te permiten trabajar para empresas locales.
- Duración de la estancia: La mayoría de las visas son válidas de seis meses a un año, aunque algunas permiten estancias más largas, como en Tailandia (hasta cinco años). Muchas son renovables bajo ciertas condiciones.
- Beneficios fiscales: Muchos países ofrecen tasas bajas de impuestos o regímenes especiales para nómada digital. Lo explicaremos más adelante.
- Familiares: Algunas visas permiten traer cónyuges e hijos, generalmente con requisitos de documentación y, a veces, de ingresos o ahorros adicionales.
No cumplir con los requisitos de una visa resultará en la negación de tu solicitud. Para evitar decepciones, es crucial investigar bien antes de aplicar.
2. Solicitar una visa de nómada digital: una guía paso a paso
Los pasos para solicitar un visado de nómada digital son diferentes en cada país. Sin embargo, aquí tienes una guía básica paso a paso para darte una idea del proceso:
Paso #1: Completar un formulario de solicitud: Esto generalmente puede hacerse en línea, aunque algunos países requieren una versión impresa y firmada. Para evitar retrasos, asegúrate de que los detalles proporcionados sean precisos y estén actualizados.
Paso #2: Programar una cita con la embajada o consulado: Es en este momento cuando enviarás oficialmente tu solicitud. Dependiendo de dónde estés, podrías necesitar viajar a un país vecino. Las citas pueden tardar en conseguirse, así que planea con antelación.
Paso #3: Preparar tus documentos: Necesitarás documentos para demostrar tu estatus de empleo, ingresos y más. Algunos países exigen traducciones o copias certificadas.
Paso #4: Enviar tu solicitud: Cuando todo esté listo, envía tu solicitud y documentos en la embajada o consulado. También podrías necesitar asistir a una entrevista de visado y pagar una tasa.
El proceso de solicitud de un visado de nómada digital puede tardar tan poco como una semana o hasta seis meses. Depende totalmente del visado que solicites y de las particularidades de tu situación.
3. Entendiendo la residencia fiscal y obligaciones
Entender tus responsabilidades fiscales es fundamental para una experiencia de nómada digital tranquila y sencilla — pero estas difieren de un país a otro. Para empezar, muchos países solo te consideran un residente fiscal si pasas más de 183 días al año allí. Entonces, si solo estás allí por una corta estadía, puede que no necesites preocuparte. Pero las cosas pueden complicarse un poco más que eso…
Toma España, por ejemplo. Para mantener tu visado de nómada digital válido, necesitarás pasar al menos la mitad del año en el país, lo que significa que pagar impuestos locales es inevitable. Sin embargo, el país también tiene un esquema especial para nómadas digitales, que les permite pagar a una tasa fija del 24% sobre ingresos inferiores a €600.000 por año.
Además, también podrías necesitar declarar impuestos (y potencialmente pagarlos) en tu país de origen, incluso mientras trabajas en el extranjero. Los ciudadanos estadounidenses, por ejemplo, deben declarar impuestos en los EE. UU., no importa dónde vivan. Sin embargo, los nómadas digitales generalmente pueden evitar la doble tributación a través de créditos fiscales extranjeros.
En resumen, es complicado — y es importante leer sobre tu situación específica antes de comenzar como nómada digital. Sobre todo, no descuides tus obligaciones fiscales, o podrías arriesgarte a multas, sanciones y otras consecuencias legales.
4. Gestionando seguro de salud, seguridad social y beneficios
Muchos visados para nómadas digitales requieren prueba de una póliza de seguro de salud que cubra la duración de tu estancia, asegurando que no sobrecargarás los sistemas de salud locales si necesitas tratamiento. Actualmente, existen muchas compañías de seguros que atienden específicamente a nómadas digitales con opciones que proporcionan cobertura en varios países a varios precios.
Los nómadas digitales también pueden estar obligados a pagar contribuciones a la seguridad social, ya sea en casa o en el país donde estén viviendo. Por ejemplo, los ciudadanos estadounidenses deben pagar impuestos de Seguridad Social y Medicare basados en sus ingresos, incluso si están trabajando desde el extranjero. Si pagas contribuciones a la seguridad social en tu país de residencia, podrías acceder a beneficios como la sanidad pública.
5. Lidiando con bancos y pagos en varias monedas
Gestionar finanzas en diferentes monedas es otro desafío importante para los nómadas digitales. Por ejemplo, imagina que trabajas en Colombia como freelancer para clientes europeos. Probablemente recibas pagos en euros, pero necesites pagar por alojamiento y otros gastos en la moneda local, el peso colombiano.
Los bancos tradicionales pueden cobrar tasas pesadas por conversiones de moneda y pagos internacionales. Afortunadamente, ahora existen soluciones bancarias digitales como Monzo, Starling, Revolut y Wise, que están específicamente diseñadas para manejar múltiples monedas con mayor flexibilidad.
En algunos casos, los nómadas digitales pueden verse obligados a abrir una cuenta bancaria local. Por ejemplo, esto es necesario en ciertos países europeos para pagar alquiler, hacer pagos de impuestos y configurar contratos para cosas como teléfonos móviles y servicios públicos.
6. Superando preocupaciones sobre ciberseguridad y privacidad de datos
Trabajar en varias jurisdicciones también plantea riesgos de seguridad de datos y ciberseguridad. Los nómadas digitales deben estar atentos a las leyes locales de privacidad de datos, como el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) que se aplica en toda la UE y en algunos otros países.
También deben ser cuidadosos al usar redes públicas de internet — especialmente al acceder a datos sensibles pertenecientes a clientes o empleadores — ya que esto puede abrir la puerta a amenazas de ciberseguridad. Una solución común es invertir en una VPN, que garantiza acceso a internet privado y seguro.
Los nómadas digitales también deben estar atentos a las herramientas que utilizan para el trabajo y la comunicación. Aunque es cierto que un portátil es todo lo que técnicamente necesitas para ser un nómada digital, también necesitarás programas y plataformas importantes para colaborar eficazmente con clientes, empleadores y colegas a distancia.
Contratando nómadas digitales: lo que los empleadores deben saber
Muchos empleadores dudan en permitir que sus empleados remotos trabajen desde el extranjero, citando a menudo preocupaciones fiscales y legales. Y es cierto que los empleadores de nómadas digitales tienen ciertas obligaciones.
Primero, los empleadores deben asegurarse de que sus trabajadores estén trabajando legalmente y que sus impuestos se paguen correctamente. Esto puede implicar deducir los importes correctos de los salarios y remitirlos a las autoridades fiscales en el país en el que el empleado está trabajando.
Los empleadores también están obligados a cumplir con las leyes laborales locales, que pueden variar significativamente entre países. En algunos países, esto puede significar proporcionar vacaciones adicionales, protecciones de despido o beneficios como el decimotercer salario.
Otra preocupación importante para los empleadores de nómadas digitales remotos es el establecimiento permanente. Este es un concepto fiscal que podría hacer que una empresa sea responsable de impuestos corporativos en otro país si tiene una presencia significativa allí. Contratar a un nómada digital no necesariamente desencadena un establecimiento permanente — pero es importante comprender el riesgo.
Preparándote para el futuro del nomadismo digital en 2025
El estilo de vida de los nómadas digitales solo va a crecer en popularidad a medida que la tecnología continúa mejorando y más países introducen visados específicos para trabajadores remotos. Y, en el mundo interconectado de hoy, es fácil pensar que convertirse en un nómada digital es tan simple como empacar tu portátil y tomar un avión. Pero la realidad es que los nómadas digitales deben navegar por una variedad de requisitos legales y de cumplimiento.
Out of Office de CXC es una plataforma orientada por la comunidad construida para conectar trabajadores remotos y nómadas digitales, dondequiera que estén. Abarca un tablón de empleos lleno de oportunidades remotas globales, junto con soporte para reubicación, visados y nómina, todo diseñado para ayudar tanto a los nómadas digitales como a sus empleadores a cumplir con las regulaciones locales. Crucialmente, Out of Office también proporciona a los nómadas digitales un sentido de pertenencia, capacitándolos para prosperar en funciones remotas en cualquier lugar del mundo.
